Ricos y Pobres (Primera parte)

9.09.2005

Un niño llamado Dinero vivía hace unos años en un País llamado Pobre. Pobre era un país rural, con no mucha población, de gente humilde y simple. No habían muchos recursos, la mano de obra era escasa. Dinero vivía con su madre y hermana. Su padre, se fue de Pobre a el país Rico, dejando a la madre de Dinero a cargo de su hermana y el. Su madre tenia grandes planes para Dinero, trabajaba lo que podía para darle una educación, que no digamos que era la mejor, pero era a lo que podía optar su madre. Su hermana siempre ayudaba a su madre en los quehaceres del hogar. Limpiaba la casa, hacia las camas, cocinaba, etc. Y lo mas seguro que seguiría el mismo camino que su madre, tendrían la misma vida. Dinero era muy esforzado, y tenia claro que tenia que sacar adelante a su familia, y no dejar que se hundan en Pobre. El no quería quedarse en Pobre, el tenia planes, metas y objetivos. El quería viajar, quería estudiar y conocer. Pero para eso se tenia que esforzar. Paso el tiempo, Dinero dejo la escuela, y se decidió irse a Rico. Alla no tenia donde ir, pero ya vería que haría. Un día de noche, Dinero se levanta de su cama. Era una noche como cualquiera otra, solo por una diferencia, el se iría. Prendió una vela, procurando no despertar a su hermana que dormia con el en el mismo dormitorio. Abrió el cajón de su velador. En el, tenia fotografías de su padre y de su familia, recuerdos de amigos, cartas, pequeños juguetes de mas pequeño, un lápiz y una moneda. Fue al otro rincón de la pequeña habitación. Abrió otro cajón en el cual el guardaba su poca ropa que tenia. Tomo un pantalón, un chaleco y una polera. Vio la mochila de su hermana. Aquella que ella usaba para ir a hacer las compras al mercado. La tomo. Guardo su ropa. Fue al velador, saco una carta vieja de su padre y tomo un lápiz. Tomo su vela y fue a la cocina. Se sentó. Empezó a escribir en el reverso de la carta otra carta para su madre y hermana. Escribió:

"Madre:

No se si será lo mejor, o lo peor. No se si estoy equivocado o en lo correcto. Solo se que tengo que irme. Siento que aquí en Pobre me hundo, siento que me ahogo en una piscina de promesas que nunca se harán realidad. Cada mañana veo por la ventana al despertar, y siempre veo lo mismo. Gente sin esperanzas, gente que se conforma con lo que tiene. ¿Pero que tienen?... Nada. Aprendí de ti muchas cosas, aprendí de ti a nunca conformarme con lo que tengo. Siempre aspirar a mas. Es por eso que lo hago. En esto esta el fruto de tu cosecha. Pero te prometo, te prometo que volveré. Y las sacare de aquí, se los prometo.

Hermana:

Cuida a mi madre. Cuídala como ella me cuido a mi. Se tu la madre ahora. Ten fe, por que volveré.

Las quiere, Dinero."

Luego de escribir aquella carta, apago la vela y se marcho. Cerro la puerta y miro aquella calle que tantos recuerdos guarda para el. Como siempre, solitaria. Pero pronto esperaría ver miles mas de calles como esas, pero llenas de personas día y noche. Sintió una pequeña brisa, sintió un poco de frío. Agacho la cabeza y tomo camino a Rico. Rico estaba muy cerca de Pobre. Rico rodiaba a Pobre por todos lados. Era como la perla que se esconde en un duro caparazón. La carretera desde la casa de Dinero estaba a no mas de 30 kilómetros. Dinero los camino, por que sabia que nadie de Pobre lo llevaría. Ya en ella, Dinero cansado se sienta a una orilla. Sentía frío, y ya tenia un poco de hambre. No había guardado nada de comida en la mochila, por que sabe que a su madre le cuesta mucho conseguirla. Estuvo sentado unos largos 30 minutos, sin ver pasar nada. Solo el ruido del viento que azotaba contra los pequeños arbustos que nacían en los alrededores. Se quedo dormido. Derrepente siente un ruido... era un automóvil. Miro para los 2 lados de la carretera. Pero no veía luz alguna que le digiera por donde venia. En aquel momento divisa en el fondo una pequeña luz, que con el transcurso del tiempo se agrandaba. La miraba fijamente. Preparo sus pocas cosas que traía y se alisto para hacer parar el automóvil. Avanzo unos pasos hacia el. El automóvil se detuvo. Miro por la ventanilla pero no vio a nadie. Derrepente escucha que el motor se apaga. No entendía. Era casi primera vez que el veía un automóvil. Siente que abren la puerta del conductor, escucha como los 2 pies pisan el pavimento. Se para. Dinero la mira, ella estaba de espalda. Tenia una cabellera larga. Se da vuelta, se apoya en el auto y lo mira. El inmóvil, no reacciono a nada. Para el era ver una flor en el desierto. La encontró hermosa, amor a primera vista. Si hubiese habido una Iglesia en aquel lugar, el se habría casado inmediatamente con ella, sin ni siquiera preguntarle su nombre. Es esa belleza que envuelve, en unas redes tan finas y suaves que te gustan. El le explico su situación. Y ella por suerte iba camino a Rico. Lo invito a subir. El sin pensarlo subió. Ya dentro del auto se sintió seguro, pero un poco nervioso. El auto por dentro era un poco desordenado, muchos papeles regados por todos lados. Latas de gaseosas en el suelo y una radio con música popular. Música que nunca había escuchado. Partieron. En el camino mientras conversaban, ella le confeso que vivía en Rico y que tenia familia en Pobre. Con aquella confesión entendió la música. Debe ser de esa que escuchan en Rico, pensó. El viaje fue tedioso. El auto no era muy amplio y se sentía un poco incomodo. Ella manejo toda la noche. Al amanecer el dormia. Ya estaban en Rico. Unos rayos de sol se levantaban por la montaña, atravesaron los vidrios y dieron justo en la cara de Dinero. El se despertó. Al abrir los ojos se dio el susto mas grande de su vida, no podía creer lo que estaba viendo. Rico para el era increíble, algo nunca antes imaginado. Vio miles de cosas nuevas. Era como un sueño. De esos sueños fantásticos, donde uno vuela y tiene alas. Era algo parecido. Ella se rio, y el sonrojo. Sabia que el se asombraría a ver Rico. Siguieron conversando. El no sabia para donde iban, ni tampoco donde estaban. Iva a ser mas difícil de lo que pensaba. En la conversación supo que tenían la misma edad y que compartían varias cosas en común. Supo un poco mas de su vida y ella de la de el. Le contó a lo que vino a Rico, aunque mintió un poco, y a ella le pareció interesante. A el le gustaba mirarla, la encontraba hermosa. Pensó que podía pasar algo entre ellos. Ella trabajaba, y tenia planes con otro tipo. Ella le dijo que había ganado un amigo mas, ese era el, Dinero. El le contesto lo mismo. Luego de un rato ella detiene el auto en frente de un edificio. El creyó que era una casa encima de otra, y no tenia explicación de como lograron montarlas tan perfectamente. Pero no le importaba, tenia su mente abierta a nuevas experiencias y ideas. Ella le dijo que aquella era su casa. Que lo tenia que dejar aquí, que cualquier cosa ella estaría para ayudarlo. Le pregunto que que haría el ahora. No contesto. Solo se bajo y dio las gracias. Justo cuando cerraba la puerta, ella lo llama y le dice "Hey! No preguntaste mi no nombre, ¿No te interesa?" El tartamudeo un poco, y se lo pregunto. Se llamaba Mujer. Cerro la puerta y el auto entro al subterráneo. Que para el parecía como si el pavimento abriera una bocota y se tragara el auto. Ya en Rico, no sabia a donde ir ni que hacer. Recordó inmediatamente su calle de su casa en Pobre. Y vio que tenia razón. Estas calles están repletas de gente y de vida. Al frente vio una pequeña plaza. Fue para alla. Se sentó en frente de una pileta. Tenia hambre, mucha hambre. Y una sed tan grande que por el, tomaría agua de esa misma pileta con agua turbia. Se preguntaba una y otra vez que haría. No sabia donde ir. Se sentía desamparado. Como una hormiga sola en un nuevo jardín, separada de su verdadero hogar. Vio que niños venían a jugar al parque con sus padres. Se sintió triste de no tener aquella oportunidad que tienen esos niños de compartir con sus padres. Lloro un poco. Y lo recordó. Recordó pequeños momentos que tenia grabada en su memoria, eran como fotografías. Se alegro. Nuevamente sintió sed, pero mucho mas que antes, ahora si que se tomaría aquella agua turbia de la pileta. Vio a los niños que se acercaban a una especie de metal, con una pequeña pileta en la cima. No entendía nada. No sabia a que iban a ella. En aquel momento uno de los niños aprietan un botón de metal en el medio de aquel extraño objeto. Vio agua, agua que salía de ese fierro. Otra vez se sentía en un sueño. ¿Como de un fierro va a salir agua?. Pero no importo. El padre llamo a sus hijos y ellos corrieron hacia el. Se fueron. Dinero sentado miraba fijamente el objeto. Con su boca seca como la calle de su casa en Pobre. Se paro y fue al mismo lugar de donde vio salir agua. Lo rodeo, lo miraba con susto. Pero no aguantaba mas. Apretó con temor el pequeño botón, y se corrió a un lado. Vio como salía un largo chorro de agua. Se alejo mas y mas. Después de unos segundos paro. Volvió a apretarlo. Otra vez salió agua. Volvió a parar. No aguantaba mas. Lo apretó y puso su boca en aquel extraño objeto. Tomaba agua como si cada gota fuera la última. Como un niño toma leche del seno de su madre, con esas ganas. Sacio su sed. Miro el lugar donde se había sentado. Su mochila había desaparecido. Se extraño. Como va a ser que se pierda en un solo minuto. Nuevamente no entendía nada. En Pobre nunca se le había extraviado nada, pero ahora aquí en Rico es lo primero que le pasa. Ahora si que no tenia nada. Nada de Nada. Estaba solo, muy solo. Solo tenia a su amiga Mujer y que estaba a unos pasos de aquella plaza. Miro el edificio que para el era una casa arriba de otra. Pero ¿En cual vivía Mujer?. Su estómago empezó a sonar, el hambre lo tenia débil. Cruzo la calle y se paro en frente de aquel edificio, listo para subir y tocar a la puerta de Mujer. Contarle la verdad. De que no tiene donde ir, de que no tiene dinero ni ropa, ni nada. ¿Que pasaría? ¿Mujer le diría dinero, comida, ropa? Sentía vergüenza. Pero no tenia otra opción. Subió las pequeñas escaleras y abrió una gran puerta de madera con vidrio. Primera puerta tan grande que veía en su vida. Entro a un lugar hermoso. Con un aroma agradable. Ese solo espacio era 5 veces su casa. Todo brillaba. Se le acerco un señor, que era el conserje. Le dice "¿En que lo puedo ayudar, Señor?". No respondió. Sentía demasiada vergüenza. Repitió la misma pregunta. Dinero reacciono y dijo que buscaba a Mujer. El hombre se dirijo a un rincón. Dinero vio que apretó un botón. Miro para todos lados, el creyó que iba a salir agua de algún lugar, pero se equivoco. En ese momento sintió la voz de Mujer en el rincón en el cual se encontraba el conserje. Veía como el conserje hablaba solo, pero Mujer lo escuchaba y lo contestaba. El conserje le pregunta a Dinero "¿Su nombre, Señor?". Dinero respondió. Ve que el conserje afirma con la cabeza y dice "Muy bien señor, por aquí". Lo guía a una puerta de metal. Habían 5 puertas mas como esas. Se abre. Era un espacio reducido. El conserje entra y Dinero copiando el movimiento, hace lo mismo. Ve que el conserje apretar el numero 4. Se pregunto por que. Pero no importo, por que se asusto al sentir un ruido raro, y sentir un movimiento en aquella habitación. La puerta se abre y ve que no esta en el mismo lugar. Otra vez se sintió como en un sueño. El conserje le dice "Es aquí, Señor. Vaya al 43. Adiós". Dinero se baja sin saber por que. Ve que el conserje quedo dentro de la habitación y se cierran las puertas de metal. Mira por el largo pasillo. Estaban las mismas 5 puertas de metal que el vio abajo. Al frente de el, el numero 43. Lo vio, pensó y reacciono. Toco la puerta. Se escucha la voz de Mujer diciendo que ya venia. Sus pasos se acercan, cada vez mas fuertes. Se abre la puerta blanca y grande, no tan grande como la de abajo. Dinero ve a Mujer. Mujer sonríe.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Loco, leí... aunque es más que la cresta, ya veo porque nisiquiera pescabas MSN. Espero la 2da parte para dar mi opinión =)

Anónimo dijo...

best regards, nice info free dodd hand bag patterns wedding dresses Direct tv satellite radio programs 19 tall tote Used golf carts sales Edinburgh glasgow solicitor authentic designer handbags discount pop up blocker downloads bed california in store water